Análisis Funcional: ¿Se puede explicar y predecir cualquier conducta?

El comportamiento es el objeto de estudio de la Psicología y éste se atiene a unas leyes que explican su aparición, mantenimiento y modificación. La Psicología científica se ha ocupado del estudio experimental de esas leyes, llegando a constatar la existencia de unos principios de aprendizaje (condicionamiento clásico y condicionamiento operante), en base a los cuales podemos explicar cualquier comportamiento, desde el más simple al más complejo, y en cualquiera de sus morfologías o formas (comportamiento cognitivo, motor, respuesta fisiológica…).

 

Pensar, hacer, decir, emocionarse… Todo ello es conducta y responde a las mismas leyes de aprendizaje. A veces el observador es la propia persona (cuando piensa, imagina, se preocupa, planifica, se emociona…) y otras veces la conducta es observable externamente (cuando se actúa en el entorno). De esta forma podemos clasificar la conducta en “manifiesta” o “encubierta” (en función de su observador) o en cognitiva, fisiológica, motora (en función de su forma).

 

Pero, ¿nos ayudan estas clasificaciones a entender la conducta, a comprender por qué alguien hace lo que hace, piensa lo que piensa o se siente como se siente?, es decir, ¿la forma o la “observabilidad” de la conducta nos sirven para explicarla? La respuesta es no. Dichas clasificaciones nos dan información sobre la conducta, nos ayudan a describirla, pero no nos dicen qué la causa, por qué aparece o por qué se mantiene en el repertorio de conducta de la persona; para ello necesitamos analizarla funcionalmente.

 

Pero, entonces, ¿qué es analizar funcionalmente la conducta? Aquí es donde aparece el Análisis Funcional… ¿quieres saber más?

 

 

1. Qué es el “Análisis Funcional” de la conducta

 

El Análisis Funcional es la herramienta que tenemos los psicólogos para explicar la conducta en términos científicos. Sí, en términos científicos. Por ello, si queremos ser psicólogos rigurosos, responsables y eficaces en nuestro quehacer profesional, debemos conocer y aplicar esta herramienta en nuestro día a día, no importa el ámbito de actuación del psicólogo (recursos humanos, clínico, educativo…); puesto que en todos los ámbitos la persona se comporta, en todos ellos podremos explicar científicamente dichas conductas.

 

Para entender esta herramienta, primero debemos tener en cuenta dos aspectos:

 

ㅡ Que la conducta es interactiva, es decir, ocurre en la interacción que se produce entre la persona y su contexto o ambiente; ya sea este último “interno” (lo que ocurre “dentro” de su organismo. Por ejemplo, si la persona siente hambre, probablemente esa variable o circunstancia dará inicio a la conducta de “buscar algo de comer”) o “externo” (lo que ocurre “fuera” del organismo. Por ejemplo, si la persona está sentada en la mesa delante del plato de comida, probablemente iniciará la conducta de “comer”); por tanto, la conducta está íntimamente relacionada o es dependiente de lo que ocurre antes o después de ella en ese contexto o ambiente en el que aparece, sea “interno” o “externo”.

 

ㅡ Que cualquier conducta, desde la más “simple” hasta la más “compleja” o la que resulta más problemática o genera más malestar a la persona, como la que menos, toda se explica en base a los mismos principios de aprendizaje, y por tanto, unas y otras pueden ser explicadas de la misma manera (no hay misterio más allá).

 

 

2. Ideas clave para entender el “Análisis Funcional”

 

Explicar una conducta y entender por qué aparece y se mantiene implica analizar las variables y estímulos que participan en esa interacción concreta: Los antecedentes y los consecuentes de los que esa conducta es función.

 

Por ejemplo, si tengo hambre y como, eliminaré esa sensación desagradable de hambre. Por tanto, aprenderé que la conducta de comer me es útil para eliminar la sensación de hambre y en el futuro la repetiré en situaciones similares.

 

ㅡ Una conducta sólo puede ser explicada por estímulos y variables que aparecen en el presente: Los antecedentes (lo que ocurre inmediatamente antes y la desencadena) y los consecuentes (lo que ocurre después y afecta a la probabilidad de aparición posterior). Estas son las variables funcionales.

 

Por ejemplo, podrías ir a la comida con la intención de no comer postre, pero cuando aparece la tarta frente a ti, será probable que respondas ante el estímulo inmediatamente presente queriendo comer de ello. Esa es la variable que funcionará como antecedente y no la promesa que te hiciste el día antes… A menos que logres hacer explícito en ese momento tu compromiso a no comerlo.

 

ㅡ Puesto que la conducta es un flujo continuo, para analizarla debemos segmentarla y seleccionar la secuencia concreta que nos interesa explicar.

 

Por ejemplo: ¿qué variables influyen en el inicio de la conducta de comer? ¿qué hacen que se mantenga? ¿qué hace que le pongamos fin? Puede que te sientas lleno (estímulo “interno”) y pares de comer (respuesta); pero igual si aparece tu postre favorito (estímulo “externo”) vuelves a comer, porque el sabor de ello es “de lo que más disfrutas en el mundo” (consecuencia satisfactoria que hará probable que la siguiente vez que aparezca ese postre lo desees comer).

 

ㅡ Existen otras variables que influyen en la conducta pero que no son exclusivas de la interacción ni del momento en que se produce y que podemos situar tanto en el individuo como en el entorno. Pueden entenderse como un “caldo de cultivo” que nos ayuda a comprender la conducta de forma más global y holística. Éstas son las variables disposicionales.

 

Por ejemplo, si llevas mucho tiempo sin comer tu tarta favorita será más probable que te apetezca comerla. El valor del estímulo aumenta al estar privado de él.

 

ㅡ Localizar las variables que explican la conducta nos permite además poder predecirla, es decir, estaremos en condiciones de hipotetizar cómo probablemente se comportará la misma persona ante condiciones contextuales similares.

 

Por ejemplo, para quien te conozca bien, podría ser bastante predecible saber que caerás en comer tu tarta favorita en cualquier condición que aparezca… Al fin y al cabo, siempre lo haces.

 

ㅡ Contemplando ambas variables en el análisis obtendremos una comprensión profunda y amplia de la conducta. El Análisis Funcional no puede ser descrito como una explicación superficial y limitada (como se ha hecho y se hace ver desde algunas corrientes), sino como la explicación más rigurosa y exhaustiva posible, por varias razones: Se fundamenta en procesos de aprendizajes demostrados científicamente y contempla todas las variables que afectan a la conducta y de las que tenemos conocimiento (tanto aquellas de las que depende la emisión de la conducta, como las que la influyen de algún modo en esta emisión).

 

Por ejemplo, la conducta de comer tu tarta favorita es resultado de un proceso de aprendizaje: Un día la probaste y te gusto y a partir de ahí siempre que la comes la disfrutas intensamente. Si bien, podría ocurrir que bajo ciertas variables, la conducta de comerla se viese afectada: Igual en verano es menor la cantidad que te pones, o igual optas por comprometerte verdaderamente con la dieta y en el momento en que ves la tarta te recuerdas que “no debes comerla”. Igual un día tienes un empacho, y eso cambia la función que hasta ahora tenía la tarta para ti. Las interacciones persona-estímulo pueden variar, el análisis del comportamiento no puede ser rígido e inmutable.

 

ㅡ Conductas similares en cuanto a su forma pueden tener una función diferente. Y conductas con la misma función pueden ser diferentes en cuanto a su morfología.

 

Por ejemplo, puedes comer para aliviar el hambre, para disfrutar del sabor de ese alimento que te gusta, para remitir un estado de ansiedad… (misma conducta y diferente función); como puedes salir a correr para manejar el estado de ansiedad que sientes o puedes ir a la nevera y buscar algo de comer para manejar esa ansiedad… (diferente conducta, misma función).

 

ㅡ El Análisis funcional es una hipótesis de trabajo que guía cualquier intervención que quiera llevarse a cabo (bien sea una intervención educativa, laboral, clínica…) y que debe ser puesta a prueba durante la misma. Si nuestro análisis de la conducta ha sido adecuado, “tocando” o modificando las variables de las que la conducta es función, así como alguna de las que influyen en su aparición, podemos provocar los cambios deseados en el comportamiento.

 

Por ejemplo, si te mantienes alejado de tu tarta favorita (por ejemplo levantándote de la mesa en el momento del postre) dificultarás caer en comerla. Esto se llama “control estimular” y supone introducir una modificación en los antecedentes de la conducta. Si no hay tarta a la vista, difícilmente emitirás la conducta de comerla.

 

ㅡ El Análisis Funcional es único y exclusivo de cada caso concreto, porque cada persona se ve afectada por unas variables contextuales diferentes. Cada persona es producto de una historia de aprendizaje previa que afecta a cómo responde a su contexto estimular, en base a las experiencias que ha tenido previamente.

 

 

 

3. Respondiendo a la pregunta inicial

 

Concluimos este post respondiendo a la pregunta del título: Cualquier conducta puede ser explicada, y no simplemente descrita; y podemos predecir cualquier conducta cuando conocemos las variables de las que esa conducta depende.

 

Si queremos que la Psicología se erija como la disciplina que se ocupa del estudio científico de la conducta, no podemos ignorar aplicar los conocimientos teóricos y las herramientas, tecnologías, técnicas y procedimientos aplicados que nos permitirán conferirle ese estatus.

 

El “Análisis Funcional” es una de nuestras herramientas básicas e imprescindibles.

 

Si no eres psicólogo, pero te interesa el tema, o en algún momento quieres buscar ayuda profesional, comprueba que tu psicólogo tenga una concepción científica de la psicología y aplique los principios de aprendizaje y el análisis funcional en su trabajo.

Si eres psicólogo, la decisión sobre cómo hacer tu trabajo está en tus manos.

 

 

REFERENCIAS:

 

· Freixa i Baqué, E. (2003). Qué es conducta. Revista Internacional de Psicología Clínica y de la Salud. Vol. 3, No 3, pp. 595-613.

 

· Froján, M.X. y Santacreu, J. (1999). Qué es un tratamiento psicológico. Madrid: Biblioteca Nueva.

 

· Pérez, V.; Gutiérrez, M.T.; García, A. y Gómez, J. (2005). Procesos psicológicos básicos. Un análisis funcional. Madrid: Pearson-Prentice Hall.

 

· Segura, M., Sánchez, P. y Barbado, P. (1991). Análisis funcional de la conducta: un modelo explicativo. Granada: Servicio de publicaciones de la Universidad de Granada.

 

 

PARA AMPLIAR TUS CONOCIMIENTOS SOBRE “ANÁLISIS FUNCIONAL”:

 

· Curso de “Análisis Funcional aplicado a la intervención clínica (ITEMA): Formación dirigida a psicólogos y estudiantes interesados en el análisis funcional”: https://www.itemadrid.net/curso-online-de-analisis-funcional-aplicado- a-la-intervencion-clinica-enero/

 

· Conferencia de Miriam Rocha Díaz en ITECOC (Instituto de Terapias Cognitivo-Conductuales) sobre “Análisis funcional aplicado a la práctica clínica”: https://miriamrochadiaz.wordpress.com/2020/07/20/analisis-funcional- de-la-conducta-segundo-mundial-de-terapias-basadas-en-la-evidencia-de-itecoc/

 

· Análisis Funcional – Miriam Rocha Díaz en Psicoflix (podcast): https://open.spotify.com/episode/4KcaSJorgJzFnskd36Vtjd?si=qwd1q-NHTr-NhsqlAN6wgg

 

· Análisis Funcional – Irene Fernández Pinto en Émora Psicólogos (podcast): https://open.spotify.com/episode/2neG5q63SgIRvjkeLZ25Ll?si=H50HH0AlTt63jsZfq6Smyw 

ACERCA DEL AUTOR

Perfil del autor:

Licenciada en Psicología por la Universidad Autónoma de Madrid y Máster en Terapia de Conducta por el Instituto Terapéutico de Madrid (ITEMA). Desempeño mi labor clínica en ITEMA y mi labor docente como profesora del Máster de Terapia de Conducta de ITEMA y del Máster de Psicología General Sanitaria (MPGS) de la Universidad Europea de Madrid (UEM).

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Información básica sobre protección de datos Ver más

  • Responsable: -.
  • Finalidad:  Moderar los comentarios.
  • Legitimación:  Por consentimiento del interesado.
  • Destinatarios y encargados de tratamiento:  No se ceden o comunican datos a terceros para prestar este servicio. El Titular ha contratado los servicios de alojamiento web a sered.net que actúa como encargado de tratamiento.
  • Derechos: Acceder, rectificar y suprimir los datos.
  • Información Adicional: Puede consultar la información detallada en la Política de Privacidad.

Usamos cookies en esta web para mejorar tu experiencia. ¿Estas de acuerdo?    Ver Política de cookies
Privacidad